



Todas las tardes veraniegas, después de la pertinentes digestión, nos íbamos a bañar al Arenal. En el río, descalzos casi siempre, sin protección solar nº 70 ni ningún tipo de mandangas, y comíamos las manzanas reinetas que estaban al lado recién cogidas del árbol, y tampoco nos pasaba nada. ¿Cómo habremos sobrevivido sin la cantidad de historias y protecciones y otros potingues que hay ahora?....

.... Y cómo sabían aquellas manzanas!!!!

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ResponderEliminarRecuerdo que en los años de escasez de agua en el pueblo (la daban por la mañana cuando todavia estabamos dormidos y por la noche cuando ya nos habiamos ido por ahí), todos ibamos con nuestro champú para lavarnos,¡pobres peces!eran los más limpios de la sierra.
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