Población

La población de El Cabaco, como todos sabemos, ha ido a menos en las últimas décadas desde la emigración de los años 50 y 60 del siglo pasado.

El ultimo censo reflejaba que la población actual es de 303 personas, de las cuales 159 son hombres y 144 mujeres.

En el gráfico adjunto se refleja perfectamente como en las décadas de los 40, 50 y 60 había una población en El Cabaco que triplicaba a la actual, y que llegada esa época comenzó a descender, si bien es cierto, que en los últimos 25 años se ha mantenido la población.

La vida de antes. El pan.

Estas dos fotografías que veis pertenecen a uno de los antiguos hornos que había en muchas de las casas del pueblo y en el que se cocía el pan. Pan para mas de diez días, blanco, tierno, que se guardaba en cajones de madera para que aguantase y que para que no se pusiese muy duro y aguantase casi como el día que se horneaba se envolvía en paños húmedos. De esa manera aguantaba mas días, y se evitaba el moho.

El proceso de la cocción del pan no se basaba sólo en amasar y meter al horno, no. Comenzaba con la siembra del trigo. Una vez segado ese trigo se llevaba a Arroyomuerto. Allí estaba la fábrica, regentada por Práxedes, donde se molía el trigo que iba a servir después para el pan. Se llevaba el trigo, desde el pueblo, en los carros, tirados por vacas. Se juntaban en Arroyomuerto más de 30 carros a moler, de diferentes pueblos, El Maillo, El Cabaco, Cereceda..., allí, una vez molido se calculaba el que se necesitaría para el pan, y el resto se vendía en la propia fábrica.

Me cuenta mi abuelo, que un vez yendo a moler a Arroyomuerto, fue parado por la Guardia Civil y multado con 50 duros (un dineral para la época, eso se pagaba por una vaca) por no llevar en el carro puesto el "tentemozo" (palabra que incluiremos en el diccionario cabaqueño). Ese año, el pan salió caro. Muy caro.

Sabia mejor que ahora el pan de esos hornos. Eso es lo que dicen todos aquellos que comieron el pan cocido en casa. Al menos se valoraba mas. La necesidad hace que le demos mucho valor a aquello de lo que carecemos.

La Dehesa. Roble centenario

Uno de los pulmones verdes del pueblo es la dehesa de arriba. En ella, junto a la charca, en el camino al "hoyo grande" se encuentra este Roble Centenario, es el que se ve en la segunda foto, el de la parte derecha, aunque el otro no le va a la zaga. Es, seguramente, uno de los muchos robles centenarios que tenemos en El Cabaco. Otro día hablaremos de los castaños, también centenarios.

Donde estamos

El Cabaco está situado en el sur de la provincia de Salamanca, justo a la entrada de la Sierra de Francia, a mitad de camino entre Bejar y Ciudad Rodrigo.

Estamos a 958 metros sobre el nivel del mar, el pueblo, porque la mayor altura del municipio es de 1723 metros en La Peña de Francia y la extensión del territorio es de 47,35 kilómetros cuadrados.

Por el norte lindamos con Tamames, con Puebla de Yeltes al noroeste y con Aldeanueva de la Sierra al nordeste. Al sur nuestro está La Alberca, Monsagro al suroeste y Nava de Francia al sureste. Por el lado que sale el sol está Cereceda de la Sierra, y por el que se pone nos encontramos con El Maillo.

Dentro del termino municipal de El Cabaco está La Peña de Francía, al igual que las fincas de Navahermosa, Zarzoso y Zarzosillo.

Las Huertas

Podría empezar esta sección de "Rincones" por cualquier otro, la plaza, la Iglesia, el Caño..., pero me apetecía hacerlo con "Las Huertas". Y es que tener una parcela en Las Huertas es tener un tesoro. Mi abuelo dice que con el cachito de Las Huertas, y otro par de huertos criaron a mi padre y a mi tío.

En Las Huertas se concentra una gran parte de la faceta hortelana que queda en el pueblo. Patatas, berzas, tomates, lechugas, fréjoles, calabacines, remolachas, etc.

Un lujo tener un cachito en Las Huertas.....

Daniel Hernández García y Salvadora Sánchez Caño.

Entre los tres suman 187 años..., y Sergio sólo tiene quince meses.

Nonagenarios, con muchas vivencias a sus espaldas.
Daniel Hernández García (4 oct 1914)
Salvadora Sánchez Caño (16 mayo 1916)

Diccionario "rústico"

Quién no ha oído palabras en el pueblo de las que no tiene ni idea lo que significan y ha tenido que acudir a sus padres o abuelos a preguntar el significado. En esta sección explicaremos varias de ellas, algunas raras, muy raras, otras mas conocidas, pero, casi todas ellas, aparecen en el Real Diccionario de la Lengua, por lo tanto, no os sorprenda que las utilicen de la manera que se hace, y no os riáis de quien hace uso de ellas.

Pronto empezaremos a aprender el significado de estas palabras.

Alberto Sánchez Hernández

Bueno, por alguien había que empezar, así que, Alberto, te ha tocado.

No en vano pasamos bastante tiempo en su bar estando en El Cabaco.

Ya estamos poniendonos en marcha

Bueno, pues este weblog que vamos a dedicar a El Cabaco ya está poniéndose en marcha. Vamos a ir poco a poco completándolo de la mejor forma que podamos.

Como ya os pongo junto al título del blog, éste, está abierto a la participación de todos aquellos que querais colaborar en su elaboración, ya sea realizando alguna entrada para relatar cosas de El Cabaco, para realizar comentarios sobre las entradas, para poner fotografías que tengáis, etc, etc. Cuantas mas colaboraciones por vuestra parte, mas se enriquecerá el blog. Será, de esta manera, una vía de enlace y comunicación para todos los que no podemos estar en el pueblo todo el tiempo que deseamos, o para saber de aquellos a los que sólo vemos una o dos veces al año.

Vamos a realizar varios apartados dentro del weblog, uno de ellos se denominará simplemente cabaqueños. En ella irán apareciendo fotos de los vecinos de El Cabaco. Tened paciencia los que queráis ver a parientes o amigos en ellas, tendrán cabida todos, pero para eso es necesario tiempo, y, vuelvo a insistiros, vuestra colaboración si ya poseéis fotos que queráis publicar. Sobre estas fotos, cabrán todos los comentarios que queráis poner, siempre desde el respeto hacia todos.

La manera que tenéis de publicar imágenes o entradas en el weblog, será, de momento a través de mi cuenta de correo electrónico salva.hernandezhernandez@gmail.com. Enviadme todo lo factible de ser publicado y en breve espacio de tiempo ya estará a disposición de todos.

En la próxima entrada seguiremos hablando del confeccionamiento del weblog. A ver si para entonces ya os habéis animado a mandar alguna cosa para publicarla.

Saludos, hasta entonces.